¿Qué tienen en común estas tres imágenes?
Pues sí, aún teniendo en cuenta lo borroso de la tercera, los 3 son ratones, pero no solo son ratones… SON SUPERRATONES.
La explicación del primero casi sobra. Muchos de nosotros hemos visto los dibujos de súper ratón, que aunque son bastante antiguos, se han repuesto una y otra vez en las mañanas de dibujos antes de irnos al colegio.
Creado por Izzy Klein inicialmente como una súper mosca, se ve que la idea no cuajó mucho y Paul Terry cambió el dibujo a un ratón. Primero fue creado como una parodia de Superman y se caracterizó durante 7 capítulos como “Super Mouse” entre 1942 y 1943. Pero en 1944 saltó a los cómics como “Mighty Mouse” perdiendo su traje azul y cambiándolo por uno amarillo (algo menos parecido al de superman pero igualmente con los calzoncillos por encima del pantalón).
Con el mismo nombre, Mighty Mouse, salió al mercado el primer Mouse multibotón fabricado y comercializado por Apple Computer en 1995. Anteriormente los ratones que se vendían eran los Apple Lisa de un solo botón. El nombre del famoso ratón de ordenador se utilizó bajo la licencia de Viacom, heredera propietaria de los dibujos animados con el mismo nombre.
Bueno, vayamos con el verdadero protagonista de la entrada de hoy. El tercero en discordia, a diferencia de los otros dos, si es un ratón de verdad, y si tiene unos poderes que están por encima de lo que es esperable para un ratón de laboratorio.
El 23 de Agosto de 2007 se publicó el siguiente artículo:
A modo de resumen, lo que hizo este grupo es un ratón transgénico, que contenía un gen quimérico en el que el cDNA de la Fosfoenolpiruvato carboxikinasa (GTP – PEPCK-C (EC 4.1.1.32) fue unido al promotor del gen de actina alpha esquelética. Con esto consiguieron un ratón que expresaba la enzima PEPCK citosólica en músculo esquelético con la misma potencia con que lo suele hacer el gen de la alpha actina, es decir, mucho mas muchísimo, y muchísimo más que más.
Pero, ¿Qué pasa con esa enzima?, ¿Cuál es su función normal?
La fosfoenolpiruvato carboxiquinasa (PEPCK) es una enzima que cataliza el paso del Oxalacetato a Fosfoenolpiruvato con el consiguiente gasto de energía en forma de GTP y formación como subproductos de CO2 y GDP. En términos generales de ruta, participa en un proceso denominado GLUCONEOGÉNESIS.
La gluconeogénesis, como su propio nombre indica, es la ruta de síntesis de glucosa de novo a partir de sustratos no glucídicos como por ejemplo aminoácidos. Además es una reacción irreversible, es decir, no funciona en sentido opuesto.
Con esta ruta y concretamente con esta enzima, como reacción limitante de la ruta, conseguimos energía en forma de glucosa, cuando no es posible conseguirlo de otra forma.
Al hacer deporte, vamos gastando la energía más rápida de gastar que tenemos en nuestro cuerpo, los azúcares; pero conforme seguimos haciendo deporte, esa fuente de energía se va agotando y nuestro cuerpo debe recurrir a otras fuentes alternativas. Otro día entraremos en la bioquímica del deporte, donde no abunda el oxígeno pero si los ácidos como el lactato.
Pues bien, volvamos a nuestro Súper ratón. Los investigadores buscaban con estos ratones transgénicos, conocer la función que tenía la enzima en músculo esquelético, pues se conocía muy bien en hígado pero no tanto en músculo.
Al conseguir una expresión constitutiva (permanente y alta) de esta enzima en el tejido muscular, observaron una serie de cambios en estos ratones respecto a los controles no modificados. A los ratones modificados genéticamente los denominaron PEPCK-Cmus mice.
Estos ratones tenían una expresión de hasta 9 unidades de enzima por gramo de músculo en comparación con las 1-3 uni/g de los controles. Eran 7 veces más activos en las jaulas y ante los obstáculos, y podían correr más de 6 kilómetros a la velocidad de 20 m/min sin descansar, en comparación con los controles que solo lo hacen hasta 0.2 kilómetros y paran a descansar con síntomas de entumecimiento.
Su consumo de oxígeno era mayor al igual que la tasa de respiración, y la concentración de lactato (indicativo de una actividad deportiva fuerte) era menos de la mitad que en sus homólogos controles, es decir, hacían mucho más deporte sin cansarse, porque sus músculos no quedaban sin oxígeno y apenas producían fermentación, responsable de la producción de lactato.
En consecuencia a su elevado metabolismo estos ratones consumían hasta un 60% más de alimento que los controles pero pesaban casi la mitad. La cantidad de grasa almacenada en su cuerpo no llegaba ni al 10% de los controles. El número de mitocondrias y triglicéridos era increíblemente alto y llegaban a vivir hasta 2.5 años (un ratón de laboratorio normal, y sin hacerle muchas perrerías suele vivir entre 6 y 12 meses)
Estos ratones eran en toda regla unos SUPERRATONES, capaces de correr y correr y correr. Observad el video, no tiene desperdicio.
En la actualidad el ratón sigue corriendo en los laboratorios de Ohio y hay grandes apuestas para ver que sucede antes, que se apague la bombilla fabricada por Thomas Alva Edison o se pare el Ratón.
Os podéis descargar el artículo gratuitamente AQUI pero de todos modos os pongo algunas imágenes del artículo.
En cualquier caso, cabe peguntarse si esto pudo tener algún efecto secundario a los ratones que fuese adverso y la respuesta es que si.
Al parecer los ratones PEPCK-Cmus mice eran tremendamente agresivos. Era muy difícil trabajar con ellos, cogerlos e incluso se requería mucha dosis de anestesia para poder dormirlos.
Quien sabe, Uno de estos dos puede ser un PEPCK-Cmus mice.
Quien seguro que es así por naturaleza y no está modificado ni alterado de ninguna forma ni se toma nada es este. Desde aquí mi apoyo para Alberto Contador.
Como siempre, espero vuestros comentarios, sugerencias, cuestiones, preguntas, quejas y demás detalles.
Está muy bien Oscar. Siendo tan difícil divulgar sin perder rigurosidad, tiene mucho merito lo que haces. No lo dudes esto te hace mejor científico. Sigue así. Por cierto tengo un amigo, Jesús Dorda, que también tiene otro blog. Te dejo el nombre por si te apetece verlo. Él me enseñó una frase de San Isidoro de Sevilla (560-636, patrón de los Científicos, que me gusta mucho: "Cuando enseñes no emplees términos oscuros, y habla de tal manera que seas entendido"
ResponderEliminarUn abrazo. Ángel.
Muchísimas gracias Ángel, Es todo un alago recibir estas palabras de ti y me alegra mucho que sepas apreciar las pequeñas aportaciones a la divulgación que desde este pequeño blog intento hacer.
ResponderEliminarPor cierto, habría que pasar esa frase de San Isidro a más de un docente jeje.
Un abrazo muy fuerte. Óskar